El sarro dental es la calcificación de la placa bacteriana o dental, formada con restos de comida, saliva y bacterias, que no se elimina correctamente ni de forma regular y se sitúa en la parte inferior de las piezas dentales o entre éstas y las encías.
También conocido como tártaro, tiene un color amarillento o marrón debido al almacenamiento de minerales sobre esta placa bacteriana, que puede afectar el tejido gingival y ocasionar enfermedades bucodentales.
Entre los padecimientos que puede producir el sarro dental se encuentran:
- Caries
- Gingivitis
- Halitosis
- Periodontitis
Caries
El esmalte de los dientes se debilita debido a las bacterias que se acumulan en el sarro dental.
Gingivitis
Las encías se inflaman y se irritan a causa de la presencia de la placa.
Halitosis
Uno de los tipos de bacterias que se acumulan en el sarro dental producen compuestos sulfurados que originan el mal aliento.
Periodontitis
Ocurre cuando el tártaro comienza a depositarse debajo de las encías y ocasionan gingivitis, que es la primera fase de la enfermedad periodontal. Este padecimiento termina en la pérdida del hueso que sostiene las piezas dentales debido a la magnitud de la infección.
¿Qué hacer para evitar o tratar el sarro dental?
La limpieza bucal realizada por un especialista es la solución idónea para eliminarlo. Es importante tomar en cuenta que quitar el tártaro no es un procedimiento que deba hacerse en casa porque se pueden ocasionar daños al esmalte.
Si el sarro está acumulado debajo de las encías, el paciente puede requerir un curetaje o raspado dental.
Por último, la mejor forma de prevenirlo es cepillarse después de cada comida, utilizar correctamente el hilo dental, evitar el exceso de alimentos azucarados, los refrescos, el tabaco, el alcohol y visitar periódicamente a los profesionales de la salud bucal.