Los dientes son partes fundamentales del cuerpo humano y de allí la importancia de la salud de los mismos. No se trata solo de algo estético, para tener una atractiva sonrisa. Tampoco se limita únicamente a la función de comer, pues unos dientes enfermos también pueden producir otras complicaciones al organismo, como la propagación de infecciones.
Los odontólogos ponen el alerta en varios aspectos, entre ellos la correcta elección del cepillo dental. Es preferible uno de cerdas suaves y flexibles, para así llegar a la mayor cantidad de sitios posibles y no dañar las encías.
La higiene de los dientes debe contar además con correctas técnicas de cepillado. Se deben alternar diversos movimientos, vibratorios, circulares y rotatorios y variando los ángulos del cepillo, para así abarcar las diversas partes de las piezas dentales.
Hay que cepillar los dientes al menos dos veces al día para prevenir la caries y hacerlo después de comer. No es recomendable que pasen más de 15 minutos desde el final de la comida y el momento del cepillado. En este proceso es vital la calidad de la pasta dentífrica. Un producto con buen contenido en flúor es lo más recomendable, pues está comprobado que este ingrediente es efectivo a la hora de prevenir la caries dental. Pero en definitiva, lo mejor es preguntar al odontólogo la pasta que se adecúe a cada necesidad.
Los especialistas recomiendan también el uso diario del hilo dental diariamente para una higiene más completa, ya que ayuda a eliminar la placa y las partículas de alimentos en lugares que el cepillo dental no puede alcanzar fácilmente.
Y nunca olvidar un aspecto en el que coinciden todos los expertos a nivel mundial: hay que visitar, aunque sea una vez al año al odontólogo para una revisión profunda de la boca y los dientes.